Terminando la comida de celebración el ambiente está muy distendido. Eso siempre significa voces más altas de lo necesario, risas como para que en la calle se enteren de lo bien que nos lo pasamos… Y cuando llegan las copas se comienzan a escuchar las primeras canciones.
Hoy presto especial atención a quien se levanta con la copa de pacharán navarro en la mano porque dice que va a cantar la canción del pacharán. Y entona el estribillo “pacharán más de mil años, muchos más…” A partir de ahí las risas siguen en aumento de forma que la canción deja de escucharse, bien porque el cantante ha callado o porque queda tapada por las voces y risas… de forma que sólo he podido escuchar el pegadizo estribillo.